¡Tenemos una planta nueva de sábila!
Siempre preparo nuestro gel de sábila con pencas que me regalan o compro en la
Plaza del Mercado. Por alguna razón, esto nunca lo había hecho con
Miss A. Siempre lo hago en la noche.
Hoy decidí enseñarle a Miss A como
prepararlo. Primero, observamos nuestra planta y hablamos un poco sobre ella.
Se enojó conmigo porque traté de explicarle que aunque tiene características muy
parecidas al cactus, muchos no la consideran un cactus. Al final, decidimos que
sí lo era.
Esta vez lo hice diferente a como siempre lo hago para que ella pudiera hacerlo. Abrí la hoja de la sábila y le di una cuchara para que sacara el gel.
Miss A echó todo en el procesador y listo.
Luego, mezclamos un poco con limón y se lo tomó muy emocionada porque esta “medicina” la había preparado ella misma.
El problema con la sábila es que tiene una resina amarilla que puede irritar la piel. Tenía miedo de raspar pero funcionó y no tuvimos ningún problema. Esta foto muestra de que les hablo.
El restante lo colocamos en la nevera. Dura meses. Es muy sencillo y lo usamos para muuuchas cosas. Pronto les enseñaré otros usos.